Esta postura ha provocado una reacción contundente en el país sudamericano, donde la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso peruano ha aprobado esta postura
PUENTE INFORMATIVO/Lima, Perú
En medio de la creciente tensión entre México y Perú, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador ha desencadenado una nueva controversia al rechazar el gobierno de Dina Boluarte en Perú.
Esta postura ha provocado una reacción contundente en el país sudamericano, donde la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso peruano ha aprobado una declaración de persona non grata hacia el mandatario mexicano.
La moción, respaldada por 11 votos, no sólo censura las declaraciones de López Obrador contra el Gobierno de Boluarte, sino que también cuestiona el reconocimiento de México hacia la actual administración peruana debido a su origen en la destitución del Presidente anterior, Pedro Castillo.
Esta medida ahora pasará al pleno del Congreso peruano, donde será sometida a discusión y posible aprobación o rechazo.
En respuesta a estas acciones, el Presidente de México López Obrador ha reiterado sus críticas hacia la clase política peruana y su trato hacia Castillo.
En una conferencia de prensa esta mañana, el mandatario mexicano expresó su preocupación por la detención del ex Presidente peruano y denunció supuestas violaciones al marco legal de Perú.
Además, López Obrador señaló la represión violenta que, según él, resultó en la muerte de al menos 70 personas.
Asimismo, el Presidente mexicano ha dirigido sus palabras hacia Estados Unidos, instándolos a no interferir en los asuntos internos de Perú y a no legitimar lo que él considera un “Gobierno espurio y represor”.
Estas declaraciones aumentan la tensión en la región y subrayan las diferencias ideológicas y diplomáticas entre México y Perú.
Por otra parte, López Obrador ha decidido no entregar la presidencia pro tempore de la Alianza del Pacífico a Perú, añadiendo otro elemento a la creciente disputa bilateral.
Esta negativa podría afectar las relaciones y la cooperación entre ambos países en el marco de este importante bloque regional.
En resumen, el rechazo del Presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, al Gobierno de Dina Boluarte en Perú ha generado una reacción contundente en el país sudamericano.
La declaración de persona non grata hacia el mandatario mexicano, aprobada por la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso peruano, refleja la tensión diplomática existente entre ambos países.
Esta situación plantea interrogantes sobre el futuro de las relaciones bilaterales y podría tener implicaciones en la cooperación regional dentro de la Alianza del Pacífico.