El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, rechazó que en su administración se esté espiando a opositores o periodistas
PUENTE INFORMATIVO/CDMX
El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, rechazó que en su administración se esté espiando a opositores o periodistas y aseguró que, de existir pruebas, se deberían presentar en una denuncia correspondiente ante la Fiscalía General de la República (FGR), para que determine si miente o no.
En su mensaje, el mandatario mexicano dijo que “no es cierto que se espíe a periodistas o a opositores, no somos iguales a los anteriores, no es cierto, yo hice el compromiso de que nadie iba a ser espiado, si tienen pruebas que las presenten”.
Así mismo, dijo que “uno de los que se quejan es el señor Ricardo Raphael, ¿qué caso tendría espiarlo?, la verdad, él no es un criminal, él es simpatizante del movimiento de derecha o conservador del país, lo más que llega es a ser un vocero del conservadurismo, que está en contra de nosotros, ni siquiera leo sus artículos, no es por desprecio, porque es predecible, ¿qué interés vamos a tener en estarlo espiando?, sería una pérdida de tiempo”.
Cabe recordar que apenas el pasado lunes los periodistas y un activista denunciaron que el Ejército utilizó el programa de espionaje “Pegasus” para hackear sus teléfonos celulares.
Entre las presuntas víctimas se encuentra el periodista Ricardo Raphael y el defensor de derechos humanos, Raymundo Ramos.
En su conferencia, el Presidente indicó que “nosotros no espiamos a opositores, lo que buscan nuestros adversarios es equipararnos con los que gobernaban anteriormente y no somos lo mismo y todos los medios de información tenían muy buena relación con los anteriores gobiernos y ahora se han dedicado a atacarnos y cualquier cosa quieren que se convierta en un escándalo para perjudicarnos”.
También sostuvo que la Secretaría de la Defensa Nacional, no espía a los opositores ni periodistas, pero que lo que sí tiene, es inteligencia para enfrentar a la delincuencia.
Finalmente, recalcó que su Gobierno busca que se atiendan las causas que originan la violencia, aunque no les guste a sus adversarios, adelantando que su administración seguirá con su política de seguridad de “abrazos, no balazos”.